Un texto corto de Woland-Blaumachen y amigos en torno a la dinámica actual de lo que denominan “la era de las revueltas”.
Fue escrito anteriormente a los acontecimientos de Brazil. Dichos acontecimientos abarcan la cuarta dinámica en la “era de las revueltas” y plantean la cuestión de la fase de la crisis en la que nos encontramos (Brazil y Turquía fueron dos milagros del FMI). Pero obviamente, la análisis de esta correlación no esta precisada en el presente texto.
En la serie de las revueltas de “excluidos” no olvidemos a Argentina en diciembre del 2012.
DE SUECIA A TURQUÍA: Disparidades en la dinámica de la era de las revueltas
El estallido social en Turquía nos obliga imperativamente a mirar de mas cerca lo que se pasa, lo que se produce, cuales son los nuevos limites producidos durante lo que hemos llamado la era de las revueltas, y de que manera serán superados. La combinación de los acontecimientos en Suecia y en Turquía, su encuentro en el tiempo, confirma la existencia de dos dinámicas de la lucha de clases evolucionando en relativa autonomía. No podemos ignorar que el encuentro esperado de estas dos practicas no se anuncia como ningún regocijo, puesto que va a cuestionar a los dos sujetos produciéndose desprovistos por el momento de ningún horizonte común en su actividad.. El envite del punto de vista de la revolución es como sera producido, sobre la base de su encuentro, su superación necesaria : la transformación de la lucha en toma de medidas comunistas contra el capital, el cuestionamiento de todos los roles que constituyen la sociedad, mediante comunización.
Ademas hay una tercera dinámica : los movimientos reivindicativos en torno al salario, que se desarrollan principalmente en la periferia que el neoliberalismo histórico integro en la acumulación internacionalizada, China y Asia del Sureste ; sin embargo los acontecimientos pendientes no hacen aparecer un encuentro de dicha dinámica con las otras. Incluso se da una cuarta dinámica referente a los países suramericanas que han logrado integrar en el interior del Estado la resistencia al neoliberalismo (Chile constituye una notable excepción ya que el movimiento de la categoría socialmente construida que es la “juventud” se vincula más a la dinámica de las revueltas). Esta cuarta dinámica es aun mas autónoma por el momento, aunque pueda preocuparnos en el futuro, particularmente en Grecia.
En lo siguiente se tratará de las dos primeras dinámicas.
Por un lado, tenemos una serie de revueltas de “excluidos”; por otro lado, desde 2011 van apareciendo una sucesión de revueltas en las que el elemento principal en lo que se refiere a su composición es el papel de la denominadas “capas medias”, cuyo discurso democrático informa a los movimientos producidos. La revueltas de excluidos se desarrollan en países situados alto en la hierarquía capitalista. Al contrario, las revueltas en las que el horizonte democrático domina, estructurando del punto de vista político a las capas medias e informando a los movimientos “de las plazas”, ocurren principalmente en países de la segunda zona y en las economías emergentes”. El que un país sin pertenecer a estas categorías se integre a dicho movimiento, i.e España, es un elemento que muestra que la crisis confirma la zapa de esta estratificación, activa ya cuando el desarrollo de este ciclo de acumulación (desde la crisis de los 1970 y 2008). El núcleo por excelencia ( EEUU. Alemania) no ha estado hasta la hora afectado por estas dinámicas. El movimiento Occupy Wall Street aun dando su nombre a esta segunda dinámica, integra esta dinámica sólo de manera muy marginal : se trataba de un movimiento de activistas (como Blockupy en Alemania), no de un movimiento de masas como el de España, de Grecia, de “la primavera árabe”, o de Turquía.
Los radicalmente excluidos del circuito oficial de la producción de plusvalía (lo que constituye su modo de integración en la sociedad capitalista : integración por la exclusión) no articulan ningún discurso; su único discurso es el saqueo y las destrucciones. No reivindican nada puesto que queda claro para ellos que es inútil (de otra manera lo harían). Saben ya que el Estado no les integrara sino que tratará gestionarles en cuanto población excedentaria. En la medida en que la crisis/reestructuración que se despliega desde 2008 reduce aun más “los gastos sociales”, bien saben que dicha gestión no puede ser sino mas y mas represiva. El hecho es que se asfixian en una “cárcel sin rejas” ( cuando uno no tiene dinero para largarse de su rincón, y que donde sea que uno vaya, la policía esta en permanencia hostigando, es obviamente en una cárcel que uno esta encerrado). En dicha “cárcel”, las relaciones comunitarias no pueden sacarlos de la miseria, y en cierta medida quedan integrados a la economía paralela cambista, i.e la pequeña delincuencia, las instituciones informales donde se reproduce una inflexible hierarquía represiva (sin hablar de la situación de las mujeres…). Así se atacan a su cárcel, se atacan a todas las instituciones del Estado, que conciben como ratificando su estatus de prisionero, y así en el momento de la revuelta, cuestionan a todo los roles sociales en su “cárcel”.
Las capas medias se revuelven porque son capas medias en desmoronamiento (Grecia, España), o porque no pueden constituirse como tal (Primavera árabe), o porque están siendo reprimidas y comprimidas mucho más que anteriormente a la crisis (Turquía)-esto implicando no sólo un ingreso menor de lo que “deberían” tener, sino también todas las otras relaciones sociales, la mercantilizacion y el cierre del espacio público,el género, la política o la política/religioreligión (en los países árabes: dos caras de una misma moneda), la raza, etc. La cuestión de las capas medias queda teóricamente abierta. Su misma definición resulta incierta : la definición admitida implicaba categorías de la pequeña propriedad de los medios de producción y profesiones individuales tradicionales (médicos, abogados,notarios,etc.). Sin embargo ¿como definir las capas medias de hoy? La estratificacion se presenta ahora en gran medida en el interior de los asalariados y de los trabajadores independientes (i.e. los que si mismos pagan su cuota a la seguridad social), y se forma sobre la base de la posición en la hierarquía del proceso de producción, sobre la base del ingreso,del acceso al crédito,etc. Entonces las masa de parados pauperizados, jóvenes que son ipso facto pobres, también los trabajadores precarios, van tirando hacia abajo el “nivel” de las capas medias y debilitan por lo tanto su influencia política en el Estado.
Estas dos dinámicas -las revueltas de los excluidos y los movimientos masivos de ocupaciones de los espacios públicos con el protagonismo central de dichas capas medias de contorno impreciso- se cruzaron en febrero del 2012 en Grecia( pero en el caso las capas medias están ya desmoronándose). Dicho encuentro resulto de las peculiaridades de Grecia, donde desde luego, a parte del movimiento de la “Plaza Syntagma 2011”, se dio el movimiento de “Diciembre 2008″( NdT : asesinato de Alexis Grigoropulos). Las revueltas de diciembre 2008, como las de los estudiantes de Chile y Canadá, se inscriben en un abanico de prácticas que se sitúan entre estas dos dinámicas. Con dichas revueltas, lo que surge es la “juventud” en cuanto sujeto socialmente construido y abarcando todos y todas los que encuentran todas las puertas cerradas, sin perspectivas de ascender en la hierarquía social, pero, al contrario de los excluidos de las revueltas en Stockholm (Suecia), o de Inglaterra, no son estructuralmente excluidos.
Las preguntas planteadas por la actualización de la era de las revueltas, tal y como realizada en Suecia o Turquía son de importancia.
A) ¿ Podrá el Estado construir el consenso del proletariado de los países de la primera zona en favor de una gestión dirigida contra los excluidos? Sobre la base de los acontecimientos de Suecia, dicha tendencia parece producirse como una respuesta casi inevitable a la actualización de dicha dinámica (en Inglaterra la emergencia de la English Defence League, así como el auge de la influencia política del UK.Independence Party, esta directamente ligado a la cuestión; tal emergencia no pudo ocurrir luego de las revueltas de 2011,( más marcadas por la participación de la población blanca). Las revueltas en Suecia actualizan la crisis de integración del proletariado en el proceso de producción de plusvalía en cuanto crisis de la emigración. La cuestión de un de un nuevo tipo fascismo, orientado hacia la creación de una “identidad europea”, básicamente racista, se inscribe por lo tanto al orden del día.
B) ¿Cual será la dinámica interna de la integración de las”capas medias” en el proletariado, y no sólo en cuanto situación sino también en cuanto actividad ?Sera concebible el que las practicas de”comuna” de quienes ocupan y defienden las plazas e intentan defender su pertenencia de clase se encuentren con las practicas destructivas de los excluidos ? Al día de hoy, los únicos ejemplos fueron el encuentro conflictivo de marzo 2006, en Francia cuando el movimiento contra el CPE(NdT : Contrato barato para los “jóvenes” : Contrato Primer Empleo), sin embargo dichos acontecimientos ya fechan, (y además ocurrieron con anterioridad a la crisis actual). otra ocurrencia fue la del 12 de diciembre 2012 en Grecia, sin embargo este encuentro fue impregnado por la confrontación en torno al “memorándum”, no pudiendo durar mas allá de la derrota de su reivindicación especifica. ¿ Cual podrá ser el resultado de los “movimientos democráticos” que el Estado no llega hasta ahora a integrar ? Estos últimos conllevan cierto “comunitarismo”. El punto de partida de dicho comunitarismo es la defensa de la propriedad etatica (nada es “común,” todo lo que no es privado es etatico) mediante su uso y sobre la base de su definición, o sea en cuanto elemento que sostiene la reproducción de la fuerza de trabajo. La plazas o los parques son espacios del “tiempo libre”. El que la crisis/reestructuración haya aumentado considerablemente el paro permite a una gran cantidad de personas mantener una presencia continua en dichos espacios durante el movimiento, sin que se considere extraño el que los que trabajan acudan sólo la noche después de la tarea: de hecho la presencia de noche es muchísimo más masiva que entre el día. Lo esencial es que se produce”una vida común en la ocupación”. La “vida en la ocupación” es por cierto una imagen de porvenir que supera el horizonte del movimiento, pero no pudiendo transformarse en una practica generalizada mientras el movimiento no cuestione realmente la estructura que mantiene la distinción entre espacio privado y publico, y en definitiva el conjunto de las relaciones capitalistas. La “comunidad de lucha”, los “gestos comunistas” no deberían ser menospreciados puesto que, en su generalización, constituyen el horizonte positivo del movimiento. Empero, en la etapa en que nos encontramos estamos obligados de buscar, por un lado, lo que cuaja el movimiento sin dejarlo intentar de generalizar dichos elementos, y por otro lado, que elementos de su contenido constituyen al tiempo las razones de su término.
Los que participan a dichos movimientos,al contrario de lo que ocurre en las revueltas de excluidos, dan mucha más importancia a la territorialización de su presencia,( lo que no deja de ser vinculado a una forma de renta asumida por producida en el capitalismo actual : la explotación juega un papel determinante en la forma de la lucha de clases). Mediante “la ocupación” reivindican el derecho suyo a su existencia material frente al Estado que pensaban “preocuparse de ellos”. Notablemente, la protección de la comuna esta asegurada sobre todo por una fracción del proletariado joven, masculino y pobre acostumbrado a hacerle frente a la policía (este papel distinto se manifestó también en Turquía, aunque en menor grado que en Egipcio). Por la fuerza de las cosas, los participantes tratan formular reivindicaciones para referirse a algo más concreto que “la democracia” alrededor de una hipotética mesa de negociaciones (pues no soportan darse cuenta que dicha mesa ya no existe, y reclaman que el gobierno admita como vigente su existencia). Este proceso, puesto que el gobierno rechaza toda negociación, desemboca naturalmente sobre un conflicto con el gobierno.
Un movimiento cuya composición está dominada por las capas medias pide la caída del gobierno, y esta demanda, vista la ausencia de un “partido de la clase obrera” que llevaría el movimiento hacia la” conquista del poder”, implicando entonces cambiar este gobierno por otro (que podría sostener la existencia y reproducción que piensan merecer). Tal tendencia endógena no entra en contradicción con los rasgos comunitaristas de las ocupaciones,sin embargo estos últimos pasan al segundo plano en cuanto elementos de constitución y de formalización del movimiento en cuando el objetivo político va concretizándose. Egipcio y Túnez demostraron claramente que la caída del gobierno pone un término a dichos movimientos. Claro que lo que, inicialmente parecía ser una victoria se reveló una derrota, puesto que nuevos estados policiales se constituyeron, y que la reestructuración se va acelerando induciendo reducción de las ayudas sociales y alza de los precios alimenticios,etc. Por lo tanto, el movimiento en Egipcio y Túnez no pudo resurgir ya que su objetivo inicial, correspondiente a su unidad fue alcanzado. El movimiento de Turquía -el hecho notable siguiente de esta dinámica, cabiendo también, a pesar de sus diferencias en este esquema- tiene que enfrentarse a otro elemento más. El poderío político del gobierno es mayor que el de los gobiernos de Egipcio y Túnez. La unidad del movimiento se fundamenta sobre la transformación del Estado en un Estado de represión policial a lo de largo de estos des últimos años. El problema planteado es el siguiente : ¿ podrán las capas medias integrarse en el proletariado , en cuanto actividad de cuestionamiento del capitalismo, si anteriormente dichos movimientos están llevados a término sólo a través de su victoria política (o sea, su derrota)? Su victoria que pasa por su derrota política, hace necesariamente emerger a su superficie las divisiones existentes. Una fracción del movimiento intenta proseguir su rebelión, que sin embargo carece de apoyo popular (i.e. Interclasista, ya que la clase es una relación, y no una categoría).¿ Cómo, sin participación masiva de los excluidos y de los pobres,este proceso de revuelta podría proseguirse ? ¿ Será esto posible ?
A la hora de escribir estas lineas, el movimiento en Turquía está pendiente. Su particularidad, combinada al hecho que se trata de un acontecimiento de alcance mundial, determina el punto donde nos encontramos. Pues nos encontramos aquí : en frente de una revuelta iniciada en otro Estado policial. Una revuelta con muy pocas posibilidades de “victoria” sobre la base de su contenido, y por esto mismo importantísima.
Las prácticas de “comuna” que necesariamente tienen como horizonte una mejor gestión del Estado burgués, pero que ven este horizonte desvanecerse, encuentran las revueltas de los excluidos sobre el hecho que para las últimas no existe horizonte ningún de cualquier “victoria ”. El resultado de dicho encuentro, se jugará, entre otras cosas, en la interacción entre las prácticas de “comuna” y las del cotidiano de la sobrevivencia de los que son estructuralmente excluidos del circuito oficial de la producción de plusvalía, determinando en gran medida el desenlace de la lucha de clases en la era de las revueltas.
Woland, Blaumachen y amigos, el 08 de junio de 2013.